En los tiempos que corren ya nadie duda del gran valor que tienen los empleados en las organizaciones. Lo son todo. La tecnología siempre avanza con las personas. Y son las personas el gran “tesoro de la organización “.

Hablamos de que las empresas ya tienen oyentes activos que alzan y entonan la voz. Son los verdaderos generadores y la gran audiencia a la que hay que prestar cada vez más atención.

Además, esta comunicación interna es segmentada dada la característica de la audiencia. Sus orígenes son diversos y de distintas generaciones. Quizás sus objetivos también sean diferentes.

La comunicación interna es ya considerada como una disciplina de alto nivel y debe ser dotada no solo de presupuesto sino de personas cualificados con equipo creativos e innovadores expertos en comunicación y RRHH con ganas de hacer.

Los instrumentos de comunicación interna deben ser diseñados conociendo muy bien la audiencia, los mensajes y la cultura de la organización.

Vamos a repasar algunos conceptos.

La comunicación interna puede definirse como el uso planeado de acciones de comunicación para influenciar sistemáticamente el conocimiento, las actitudes y los comportamientos de los empleados actuales, fomentando su participación y ayudando a generar cambios.

Estas son algunas referencias a las que puede llevar una buena comunicación interna

  • Conduce a un aumento del 40 % en la satisfacción del cliente.
  • Puede llevar a un incremento del 30 % en la rentabilidad.
  • Es parte activa en un aumento del 36 % en el rendimiento general de una empresa.

Hablar con los empleados ya no juega un segundo papel en las comunicaciones de la compañía y, de hecho, hoy día, la comunicación interna se considera una función de negocio clave que inspira y alinea a toda la organización.

Una buena comunicación interna mejora de la efectividad de la empresa: cuanta más información tengan tus trabajadores, mejorará su trabajo en equipo y su trabajo individual. Los empleados se sentirán integrados plenamente en la organización y, por tanto, se comprometerán con ella.

Mantiene a los trabajadores informados de todo lo que sucede en la empresa: nadie recibe sorpresas y todos conocen los cambios (positivos y negativos) que tienen lugar en su entorno.

Permite que la resolución de problemas sea más sencilla: si se pide opinión a los trabajadores sobre un determinado tema, es probable que la resolución de un conflicto sea más fácil porque se aportarán más ideas.

Da la posibilidad a la organización de responder más rápido ante cambios.

Promueve la confianza y las buenas relaciones entre trabajadores: ya que se evitan problemas de territorialidad. Cuando un trabajador se siente inseguro, puede volverse receloso de sus compañeros y guardar información.

Da sentido de pertenencia a la organización: se genera un sentimiento de unidad, de que las ideas y opiniones de los trabajadores son escuchadas y valoradas, de que todos trabajan juntos para llegar a la misma meta.

La clave del éxito de una política de comunicación interna reside en tener una buena planificación estratégica comunicacional vehiculada a través de diversas herramientas, como pueden ser medios digitales (intranet corporativa, newsletter, blogs, canales de televisión internos, revistas impresas y digitales, etc.); acciones grupales (desayunos y reuniones estratégicas, encuentros de comunicación, visitas a gerentes); capacitaciones a gerentes y jefes (programas de coaching, seminarios, cursos, etc.); y mediciones generales y específicas (encuestas, diagnósticos…).

Insistir en la creatividad de las personas como eje fundamental y la innovación conociendo muy bien la cultura de la organización y el papel de las personas o lideres para hacer posible que las cosas ocurran.

La comunicación interna seguirá siendo una parte vital de las estrategias de las empresas a las que hay que dedicar especial atención para alcanzar los objetivos y conseguir que la organización sea rentable y altamente competitiva.

 

Por Francisco García Cabello

– Socio director de AZC Global Integral de Comunicación y Gestión

– Fundador y Director General Foro Recursos Humanos